Hace escasas fechas D. Fernando D.Rossi Delgado, Presidente de la Sociedad de Estudios Genealógicos y Heráldicos de Canarias,  nos ha remitido un documentado  artículo sobre el otorgamiento armas heráldicas a la isla de Tenerife, por la reina Juana I de Castilla. Artículo que publicó en el año 2010 como contestación a otro de D. Domingo Barbuzano , y que estimamos que puede ser de interés para todos nuestros lectores y amigos.


Armas heráldicas de Theneryfe


A SUS SIEMPRE interesantes artículos, el sábado 9 de enero, Domingo Barbuzano sumó otro igual de sugestivo por su temática, pero encabezado con una afirmación inexacta; histórica, pero inexacta: el escudo que asigna a San Cristóbal de La Laguna corresponde por Privilegio Real a «Theneryfe».
Efectivamente,  el 23 de marzo de este 2010, se celebran los cinco siglos del otorgamiento del Privilegio (1)por el que Juana I de Castilla dotaba a la isla de Tenerife de «armas».

Asentada la nueva aristocracia insular, entra en la lógica de la época que pretendieran ennoblecer el solar (y de camino sus propias casas) desde el que controlaban la vida de la isla. Para ello, solicitaron, no sabemos si para la ciudad, un escudo heráldico que la distinguiera del resto de las ciudades del reino y destacara sus virtudes. En el Privilegio se puede leer: «Por cuanto por parte de vos, el concejo, justicia, regidores, caballeros, escuderos, oficiales e homes buenos de la ysla de Thenerife, me fue fecha relación por vuestra petiçion
[?]», y continúa más adelante: «Por ende que nos suplicavades e pediades por merced que vos diese armas [?]» , «[?] segund las otras çibdades de mis Reynos las tenían». Queda, pues, claro que hubo solicitud por parte de los recién llegados.
Pero, quiérase que dicha solicitud laurease a la isla o a la ciudad, el hecho es que Juana I de Castilla otorga un singular escudo de armas no a la ciudad de San Cristóbal de La Laguna, sino a la isla de Tenerife: «Las cuales dichas armas vos doy para que las podays poner e pongáis en el sello de esa dicha ysla, e en las banderas de ellas, e en las torres, e puertas, e puente, e en los otros hedificios e obras publicas que hizierdes e pintardes, de lo qual vos mande dar e di esta mi carta escripta en pergamino de cuero e firmada del Rey mi señor e padre, e sellada con mi sello de cera colgado de unos cordones».
El propio Antón Vallejo, escribano público del Concejo insular, en las diligencias de publicación del Privilegio escribe: «E fue puesto un paño de figuras en la pared de las casas del dicho señor Adelantado que sale a la plaça real de la dicha villa, e en él puestas las armas de la dicha ysla pintada en un papel como en esta carta real están [?] e por fe e testimonio de lo que dicho es, yo, el dicho escribano, lo firmé de mi nombre escripto e firmado a las espaldas desta dicha carta, do están ymprimidas por pintura las armas de dicha ysla [?]».
Entendemos que, interpretaciones al margen, queda claro que el escudo heráldico que el próximo 23 de marzo cumple quinientos años es el de la isla de Tenerife.
Pero, a la vista de lo que afirmamos ¿cuenta San Cristóbal de La Laguna con algún blasón cuya titularidad no sea discutible? No nos consta que la ciudad de San Cristóbal de La Laguna sea titular de otorgamiento ad hoc ninguno, ni que exista petición al respecto distinta a la ya comentada.
Sin embargo, el Ayuntamiento de San Cristóbal de La Laguna (olvidándonos de la Rosa de los Vientos) sí ha empleado otros sellos a lo largo de su historia. Como decíamos en nuestro trabajo sobre el escudo de Santa Cruz de Santiago de Tenerife, el 1 de agosto de 1876 el director general de Instrucción Pública, a instancia de D. Francisco González de Vera, a la sazón director del Archivo Histórico Nacional, solicita a las distintas corporaciones civiles y eclesiásticas copia de los sellos que poseyeran, tanto los que estuvieran en uso como los empleados con anterioridad(3). Muchos de los aportados por las distintas corporaciones municipales existentes en Tenerife tan sólo indican su nombre, generalmente grafismos de forma ovalada.

El Ayuntamiento de La Laguna constituye el caso contrario, y ello nos permite deleitarnos con un sencillo documento que, por lo cercano de las fechas, debería sernos más familiar. En él se nos descubre que San Cristóbal de La Laguna, hasta esa fecha, había usado tres sellos: dos como distintivos de la ciudad y el tercero como propio de la alcaldía para sus documentos. Este pliego(4) lleva la firma de Wenceslao Leal, que lo data el 4 de diciembre de 1876. Del primero dice que se empleó mientras La Laguna fue el «Ayuntamiento» de la isla; del segundo que se comenzó a usar tras la división territorial posterior a la Constitución de 1812. Creemos interesante transcribir el pequeño escrito:
«El primero de los sellos (se refiere al otorgado por Juana I de Castilla) arriba estampados lo usó esta municipalidad mientras conservó el carácter de Ayuntamiento de la isla, y aún con posterioridad en algunas exposiciones al Gobierno, ignorándose la época en que principió a usarse y su origen.
El segundo principió a usarlo después de 1812 y cuando ya sólo tenía el carácter de Ayuntamiento de esta ciudad, a virtud de la división territorial que se practicó después de publicada la Constitución de 1812.
Y el tercero es el que emplea la Alcaldía en sus documentos oficiales.
Ciudad de La Laguna, cuatro de diciembre de mil ochocientos setenta y seis.
Firma: Wenceslao Leal».
Lo interesante está en el segundo sello, que, de forma ovalada, tiene en su interior el lema «AYUNTAMIENTO DE LA CIUDAD DE LA LAGUNA EN TENERIFE» (curiosamente el símbolo que separa el principio del fin del lema guarda gran similitud con la Rosa de los Vientos que en la actualidad emplea La Laguna como símbolo de la ciudad) y en el centro se reproduce la figura de San Cristóbal, vadeando el agua, llevando en su hombro a Cristo niño y sostenido en lo que parece una palmera. Sería harto interesante indagar en los documentos municipales posteriores a 1812 en busca de la justificación de este emblema lagunero, su origen, de cuándo data, quién lo propuso, etc., aunque resulta obvio el porqué del motivo.
Por último, con independencia de quién hace uso de ellas, las «armas» otorgadas por Juana I de Castilla corresponden la isla de Tenerife y, en consecuencia, el escudo que se ha denominado como «insular», y que del lema original, existente en la bordura, sólo conserva, en jefe, el «Thenerife me fecit» acompañado de dos hojas de palma bajo la punta, en realidad es el que representa al Cabildo Insular de Tenerife, que lo adoptó en el momento de su constitución, hace casi cien años. Y si aún nos queda alguna duda, en la propia bordura, ocupando los flancos y el pie, se puede leer «Cabildo Insular de Tenerife».
Dicho todo lo anterior, recordando el origen y el porqué del otorgamiento de estas armas, dada la antigua costumbre del Ayuntamiento de La Laguna de usar este escudo como propio de la ciudad, y si, por ende, consideramos que la costumbre es fuente del Derecho, no seremos nosotros los que cuestionemos la identificación del binomio escudo-ciudad.
«[?] por la presente vos doy por armas el Angel San Miguel, armado con una lança, e una bandera en la una mano, e un escudo en la otra, e debaxo puesta una breña, de que sal del alto della unas llamas de fuego, que se nombra Teydan; e un Leon a la una parte de la dicha breña, e un castillo a la otra; e debaxo de la dicha breña, la dicha isla de Thenerife en campo verde, el mar alrededor, e todo ello puesto en un escudo en campo amarillo con unas letras amarillas por la orla en campo colorado que dice: Michael Arcangel beni in adiuotorium populo dey Thenerife me fecit, según va pintado en esta mi carta [?]»(5).

Fernando D.Rossi Delgado.
Presidente de la Sociedad de Estudios Genealógicos y Heráldicos de Canarias


(1)Viña Brito, Ana; Gambín García, Mariano; Ramos Rodríguez, Mª Amada; Pérez González, Leocadia. «Reales Cédulas, Provisiones y Privilegios de la isla de Tenerife (1496-1531)». Primera edición, 2006, Santa Cruz de Tenerife. Pág.105 y siguientes.
(3) Información recopilada por Dª María Carmona de los Santos, archivera del A.H.N.
(4)Depositado en el Archivo Histórico Nacional: signatura SIGIL-TINTA_SANTA_CRUZ_DE_TENERIFE, 5, N.22.
(5 )El original está depositado en el Ayuntamiento de San Cristóbal de La Laguna.