POR DÑA. MARISOL DE LAS HERAS Y OJEDA
DAMA DEL LINAJE SANTISTEBAN.


El Cuerpo de la Nobleza de Asturias celebró el pasado 19 de Octubre en Oviedo, a las ocho de la tarde, su principal cita anual: el solemne acto de investidura del nuevo grupo de damas y caballeros que ingresan en la institución, celebrado en la  tradicional iglesia de San Tirso el Real.
Esta iglesia, situada en la Plaza de la Catedral y a escasos metros de la misma, fue fundada por el rey Alfonso II el Casto de Asturias en el siglo IX. Debido a las diversas  reconstrucciones y restauraciones que ha sufrido, la última en el siglo XX, de la iglesia primitiva únicamente queda el muro testero de la cabecera. Es una auténtica preciosidad.
Interior de la Iglesia.
El Cuerpo de la Nobleza de Asturias constituido hace ya más de dos décadas, cuenta en la actualidad con más de doscientos miembros y está presidido por el Excelentísimo Sr. D. Francisco de Borbón, duque de Sevilla y Grande de España, como consejero magistral, quien en esta ocasión no pudo asistir debido a que por temas profesionales, se encontraba fuera de España en esta fecha. En su lugar, debería haber asistido la Excma. Sra. Doña María del Pilar Paloma de Casanova-Cárdenas y Barón, Duquesa de Maqueda, quien tampoco pudo honrarnos con su presencia. En su caso, fueron temas personales los que le impidieron asistir al acto, siendo por consiguiente su hijo Álvaro López Becerra, Conde de Cabra, el que presidió el mismo.
D. Manuel María Rodríguez de Maribona y Dávila, vicecanciller del Cuerpo de la Nobleza del Principado de Asturias, apadrinando a D. Ivan de Arteaga y del Alcázar en la ceremonia de jura.
Fueron varias las órdenes, asociaciones y corporaciones nobiliarias, españolas y extranjeras, las que estuvieron presentes en la ceremonia, entre otras, como no podía ser de otra manera, nuestra honorable Casa Troncal de los Doce Linajes de Soria.
La ceremonia es sencilla, aunque sigue manteniendo el protocolo ancestral, llenándola de un sabor auténtico que permite trasladarte, como si de una máquina del tiempo se tratase, a la época de nuestros antepasados. Cada caballero y dama de nuevo ingreso, apadrinado por un ya miembro del Cuerpo, se arrodilla en un reclinatorio ante el altar y, con la mano de su padrino o madrina sobre el hombro presta juramento de fidelidad a las normas del Cuerpo, comprometiéndose así mismo a honrar el legado «histórico y cultural de los antepasados, portadores de la historia del Principado y de España, con lealtad al Rey y a la Corona». 
El Excmo.Sr. D. Alfonso de Ceballos-Escalera y Gila, vizconde de Ayala y marqués de la Floresta, como padrino de D.Manuel Álvarez de Ron y González de Sela.
 Acto seguido, se les impone la condecoración propia de la Orden como prueba de su ingreso en la misma, a todos los caballeros y damas, recibiendo los unos y las otras, la venera corporativa y un bonito lazo celeste, respectivamente.
Venera corporativa.
Resaltar la presencia, entre los caballeros y damas de nuevo ingreso, de la Excma. Sra. Dña. María del Carmen Franco y Polo, duquesa de Franco y Grande de España.
Jura de la Excma. Sra. Dña. María del Carmen Franco y Polo, duquesa de Franco.
Dada la importancia de las generaciones futuras para la continuidad del Cuerpo, fueron partícipes así mismo de la ceremonia de ingreso, media docena de jovencitos y niños, quienes aunque posponen el juramento para cuando alcancen la mayoría de edad, ingresan ya como miembros del Cuerpo de la Nobleza Asturiana.
El acto de investidura se culmina con una solemne celebración eucarística, realzada en esta ocasión por los maravillosos cánticos de una coral.
Tras los actos de San Tirso, ellos vestidos de chaqué, ellas de corto, e incluso alguna mantilla española,  el Cuerpo de la Nobleza del Principado de Asturias se trasladó al Club de Tenis de Oviedo, donde antes de celebrarse la cena de gala, se hicieron entrega de los premios anuales. Entre los miembros invitados, se encontraron en esta ocasión el Ilustrísimo Sr. D Arsenio Fernández de Mesa, Director General de la Guardia Civil; el Excmo. Sr D. José María Matres Manso, Embajador de España en Mali; Mr. Richard Bruce Bernadotte Miller, Baron of Jedburgh Forest, procedente de la República de Sudáfrica, a quienes, entre otros, se les entregaron sus distinciones honoríficas.
 El Excmo. Sr. D. Arsenio Fernández de Mesa y Díaz del Río, Director General de la Guardia Civil, recogiendo en nombre del Benemérito Cuerpo el Premio «Conde de Latores» a la  Labor Humanitaria.
Finalizando con un brindis conjunto, al unísono de unos vítores al Rey, se dio apertura a la exquisita cena de gala, momento de confraternizar con todos los miembros del Cuerpo. 
Marisol de las Heras y Ojeda y  D. Manuel Ruiz de Bucesta y Álvarez, canciller-secretario del Cuerpo de la Nobleza del Principado de Asturias.
Los asistentes al acto como representantes de la Casa Troncal, D. Adolfo Romero de Marcelo y Dña. Marisol de las Heras y Ojeda, queremos aprovechar estas líneas para agradecer la invitación, una vez más, al Ilmo. Sr. D. Manuel Ruiz de Bucesta y Álvarez, canciller-secretario de la corporación,  quien es también caballero de esta Casa Troncal, felicitándole así mismo por el éxito de tan honorable acto.