Don José Luís Sampedro Escolar nos remite un nuevo escrito respondiendo a uno anterior de Don Alfonso Ceballos-Escalera y Gila. Con este escrito (dos por cada parte, si contamos el artículo inicial que dió origen a la polémica), este Blog da por clausurado y concluido el debate, que, indudablemente, pueden continuar los interesados de forma privada, si así lo deseasen.
Por nuestra parte, reiteramos nuestra máxima estima y consideración por ambos polemistas, esperando y deseando que estos escritos, de uno y otro, hayan servido para reencontrarse e iniciar una nueva etapa de fructífera colaboración en bien y provecho de estas aficiones tan queridas por todos nosotros.
RESPUESTA DE JOSÉ LUIS SAMPEDRO ESCOLAR A ALFONSO CEBALLOS ESCALERA Y GILA.
El lunes 27 de junio de 2011, el blog Doce Linajes publica un texto de Alfonso Ceballos Escalera y Gila, bajo el título de “Una primera respuesta….” con lo que parece señalar que habrá más. ¡Cuánto lo siento, porque tengo cosas verdaderamente interesantes que hacer antes que perder el tiempo discutiendo públicamente con este personaje! Ceballos-Escalera y Gila parece tener una extraña fijación por la persona de J.L. Sampedro Escolar, abajo firmante, pues, al menos desde 1995, le hace objeto de ataques injustificados en los más diversos medios. El 28 de febrero de 1995 fechó y firmó una carta dirigida a una alta instancia del reino, en la que “desmentía” ser el autor de un texto firmado por José Luis Sampedro Escolar, que estudiaba diferentes aspectos de la Sucesión de la Corona de España. Está por demostrar que persona alguna hubiese dicho que tal texto, que circulaba de manera pública y firmado, lo hubiese atribuído a Alfonso Ceballos-Escalera, pero él aprovechó la ocasión para verter diferentes opiniones personales (que nadie le había solicitado) en menoscabo de la fama de J.L. Sampedro Escolar para terminar diciendo que “no se ha movido buscando alguna posición o predicamento dentro del entorno de Su Majestad…todo lo cual no obsta para que siempre haya estado a disposición de la Casa (de Su Majestad)”. Quienes lo conocen aún se ríen de estas palabras.
Vemos, pues, que desde hace ya más de tres quinquenios hay antecedentes de Ceballos-Escalera Gila actuando muy conscientemente contra Sampedro Escolar.
Tras la reciente impugnación por parte de J.L. Sampedro Escolar como falsas de afirmaciones reiteradas de Ceballos-Escalera Gila acusándole de hacerse pasar indebidamente por Abogado del Estado, el dicho Ceballos-Escalera se escuda, de manera poco gallarda, diciendo que no citaba el nombre de Sampedro al señalar esa usurpación, cuando lo cierto es que el nº. 24 de Atavis et Armis, bajo el epígrafe “Avisos de la Cancillería”, y refiriéndose a José Luis Sampedro Escolar, dice: “En este mismo número de Atavis se publica un artículo de don Alfonso Ceballos-Escalera, desenmascarando sus numerosos errores”. Como quiera que el único artículo que firma en ese número de Atavis Ceballos –Escalera es el que se titula “Por la buena memoria de un egregio lazarista: de la cruz laureada de Franco y de la ignorancia de un malsín” es obligado en lógica colegir que se refiere en tal artículo, como malsín (cizañero o soplón), a J.L. Sampedro Escolar. En ese artículo Ceballos-Escalera aparenta escasa formación científica, pues se dedica, según confiesa, a formular disquisiciones acerca de un texto inédito que atribuye J.L. Sampedro Escolar, en un extraño ejercicio de malsana obsesión hacia su persona, pues de no muy diferente manera se puede calificar el ataque contra presuntos borradores inéditos. Por otra parte, sería interesante saber cómo ha llegado a sus manos ese presunto borrador.
Resumiendo este segundo punto, nos encontramos con que, una vez más, Ceballos-Escalera ataca injustificadamente en planos muy diferentes, a los que no escapan los personales y familiares, a Sampedro Escolar, y aprovecha la ocasión para un presunto lucimiento personal suyo.
Aparte de la ya contumaz insistencia en lo referente a la acusación de impostor, afirma Ceballos-Escalera que Sampedro Escolar no pertenece legalmente a la nobleza, cuando él sabe perfectamente que J.L. Sampedro Escolar es señor divisero hijodalgo del Antiguo e Ilustre Solar de Tejada, del que desciende por sus sangres paterna y materna. Si Ceballos-Escalera niega la condición de nobles a los solariegos de Tejada niega valor a la inclusión de tales solariegos en la guía de las Grandezas y Títulos del Reino del Ministerio de Justicia, en las que desde hace medio siglo se publica la mención al Solar de Tejada y a sus miembros como Caballeros Diviseros Hijosdalgo (el subrayado es nuestro) en el capítulo de señores y otras dignidades, porque así lo hizo S.M. el Rey Don Juan Carlos I en 1981 al ratificarles su escudo de armas.
Ceballos-Escalera sigue actuando contra sus propios actos. Dimitió de su condición de miembro de la Real Academia Matritense de Heráldica y Genealogía y luego pretendió seguir siéndolo. Renunció por escrito a su gran cruz de la Orden Constantiniana de la Orden de San Jorge, pero sigue luciendo la insignia correspondiente. Recientemente, ante el Alcalde Mayor del Solar de Tejada, ante el comandante Carrión Rangel y ante D. Fernando de Herrera y Hume, dijo que comprobaría si su acusación de impostura a Sampedro era “errónea” y que, de serlo, se disculparía. Según dice ahora, al ofendido le incumbe probar su inocencia. No diga que no me ha acusado porque lo reconoció públicamente delante de estos señores y, más aún, dijo que lo hacía por defender a José María Montells, como si no tuviese posibilidad de defensa ese señor. Los auténticos caballeros defienden a los ancianos, a las doncellas, a las viudas y a los huérfanos desvalidos. ¿Considera Ceballos- Escalera a Montells un anciano desvalido?
No, Ceballos-Escalera, yo no tengo que aportar nada, si tú dices que miento, tú tienes que molestarte en probar que eso es así. Resulta ridículo que una persona expulsada o suspendida de entidades internacionales como la Académie Internationale d’Héraldique y la Orden de San Juan de Jerusalén se permita estos excesos. Un personaje así no me va a dar instrucciones sobre formas correctas de actuar. No obstante, gracias. Gracias porque los ataques que tú profieres suelen volverse contra ti, pues ya eres muy conocido en los foros serios (y, no digamos, en los menos serios); y gracias por darme ocasión una vez más, para recordar ciertos episodios de tu nunca aburrida crónica vital.
Con mi agradecimiento sincero al blog Doce Linajes.
José Luis Sampedro Escolar.