Hace un par de días que hemos recibido, en esta Casa Troncal, el número 525 de la Revista de la Real Asociación Hidalgos de España. Edición que nos sorprendió doblemente. La Revista presenta un diseño innovador y muy atractivo, que más recuerda a una publicación especializada en materias históricas y afines, que a un boletín meramente comunicativo y de distribución interna entre sus asociados.
En septiembre de 2007, cuando se cumplía medio centenario de vida de la “Gacetilla” de Hidalgos de España, la Asociación iniciaba una nueva etapa de esa publicación, bajo un nuevo diseño, menos llamativo que el actual, pero que ya introducía excelentes contenidos y un renovado propósito de informar a todos sus lectores del acontecer de la Asociación.
 La anterior etapa de la «Gacetilla»,  llegó enmarcada dentro de un proceso de renovación de la propia institución, desde aquélla , que mereció numerosos elogios, han transcurrido ya cuatro años. Durante ese tiempo cada trimestre, los que gustamos de estas ciencias y artes, hemos recibido puntualmente una publicación ágil, dinámica y plena de información, no solo con contenidos referentes a la Real Asociación, sino pleno de apasionantes y novedosas secciones llevadas de la mano de colaboradores del más alto nivel, con contenidos imprescindibles, amenos y llenos de colorido literario.
Poco a Poco la “Gacetilla” había dejado de ser patrimonio informativo de los asociados, para pasar a ser un medio de amplia difusión y alcance, con lectores que nos íbamos asomando desde otras Corporaciones Nobiliarias y Órdenes de Caballería. La «Gacetilla» pasa a ser la revista de más de diez mil personas, con una influencia cultural e informativa inimaginable en sus inicios.
Paseándome entre sus páginas y antes de entregarme a su lectura, me paré en el apartado dedicado a “Nobiliaria”, donde la revista, entre otros muchos de gran interés, dedica un apartado a las noticias de nuestra querida Casa Troncal, en este caso a la concerniente a la aceptación de Monseñor Melgar como Capellán Mayor de los Doce Linajes.
Entre otros jugosos artículos merece la pena destacar el de D. Valentín Céspedes, sobre la Real Maestranza de Ronda, semblanza de una Institución señera en España. El Artículo de D. Faustino Menéndez Pidal de Navascués, dedicado a las Armas de los Reyes Católicos. El imprescindible artículo del Marqués de Casa Real sobre las Hojas en la Heráldica, el de D. Alfonso Enseñat de Villalonga, titulado: Colón, sus remotos orígenes escoceses, entre otros muchos de no menos interés, que completan la edición con las ya acostumbradas secciones dedicadas a la “Heráldica de los asociados”, a las Instituciones Asistenciales, a la Genealogía, o propiamente a la Nobiliaria.
Con este número se abre una nueva etapa, en la que la renovada revista, pensamos, será el vínculo de unión que servirá, como se puede leer en la editorial que abre la publicación, “para congregar no solo a nuestros asociados, sino a todos aquellos que ven en la nobleza la virtud, que entienden las acciones ejemplares como parte de nuestra actitud vital y asumen que los valores de la nobleza deben impregnar, hoy más que nunca, a nuestra sociedad”.
Amén.