LOS REYES AFRICANOS EN EL CONTEXTO DE SUS DIFERENTES PAISES. LOS CASOS DE COSTA DE MARFIL, BENIN Y CAMERÚN.
Expuestas en sus líneas generales la permanencia y cometido de los “reyes y jefes tradicionales”, vamos a continuación a analizar algunos casos de países concretos, permitiéndonos así dar una visión más completa del papel que los mismos juegan en sus sociedades. Este importante papel es el que legitima su fons honorum a la hora de ejercitar el derecho premial.
Costa de Marfil.
Costa de Marfil es uno de los países africanos donde sus “reyes y jefes tradicionales” se muestran más activos y gozan de mayor predicamento.
Organizados en torno al Consejo Superior de Reyes de Costa de Marfil, han tenido un protagonismo decisivo en la delicada crisis política desatada en el país hace unos años. Así, en el Foro de Cotonou, celebrado en el mes de julio de 2005, la opinión más compartida era «dejad a los jefes tradicionales solucionar la crisis». Nanan Dodo N’Depo Didace, Secretario General del Consejo de Reyes, abogaba por oficializar estas propuestas, de manera que fuesen inscritas en la conclusiones del Foro. «Nosotros somos apolíticos y por eso –decía- podemos actuar eficazmente».
En el 2008, el 16 de febrero, el representante especial de las Naciones Unidas, Y.J. Choi se reunió en Agnibilékrou con los miembros del Consejo Superior de Reyes y Jefes Tradicionales, presidido por el Rey Chivineh Jean Jravieh, para discutir sobre el proceso de salida de la crisis de Costa de Marfil. En la sesión plenaria del Consejo de Reyes, el representante de Naciones Unidas les exhortó a poner su autoridad y sabiduría al servicio del proceso de paz en el país, «que se encuentra en un momento decisivo de su historia». Al día siguiente, firmaron un compromiso para la promoción de la prevención de conflictos y educación para la paz.

Más recientemente, el 13 de septiembre del presente año 2010, el Primer Ministro de Costa de Marfil, Guillaume Soro, convocó oficialmente al Consejo Superior de Reyes y Jefes Tradicionales: «Os he llamado –decía- para daros cuenta de la acción que venimos llevando a cabo para hacer llegar a buen fin el proceso electoral (…) Ayudadnos a sensibilizar a los ivorianos sobre la buena ruta de las elecciones». Las cabezas coronadas, por su parte, acogieron esta llamada con entusiasmo y satisfacción. «El Primer Ministro nos ha solicitado nuestro concurso y nosotros estamos preparados para prestárselo hasta el final. Queremos que Costa de Marfil reanude pronto con su imagen de antaño a fin que sea de nuevo respetada».

Los reyes y jefes tradicionales ocupan un lugar destacado, junto a los magistrados y otros altos dignatarios en el protocolo gubernamental. Así, el Departamento de Ceremonial del Estado, dependiente del Ministerio de Asuntos Exteriores, les dirige cada año las correspondientes invitaciones para asistir a los actos conmemorativos de la independencia del país y otros actos oficiales.
Conforme a todo lo expuesto, no existe ninguna duda de la legítima facultad que asiste a estos reyes para dispensar honores y recompensas, que son altamente apreciadas y aceptadas por las autoridades del país.
Benín.
Su Majestad Kpodegbe Toyi Djgla, 16 Rey de Allada, Presidente-Fundador del Consejo Superior de Reyes de África y Miembro Fundador del Consejo de Reyes de Benín, accedió al trono de Ajjahouto el 2 de diciembre de 1992, sucediendo a su padre, Su Majestad Toyi Dijgla, 15 Rey de Allada.
Cuidadoso del desarrollo de Benín y de su reino, en el curso de sus viajes por África y Europa mantiene numerosos contactos con los inversores sobre la posibilidad de hacer negocios en Benín con total seguridad.

Sobre el plano cultural, el soberano de Allada se constituye en el garante de su tradición como un tesoro legado por sus ancestros, para lo que ha creado una activa ONG, el Centro Internacional de Investigación sobre las Culturas Tradicionales.
El Reino de Allada está administrativamente bien estructurado. Cuenta con 81 departamentos tradicionales a cuya cabeza figura un «jefe de la tierra», que está bajo la tutela de Su Majestad Kpodegbe Toyi Djgla, a quien rinde cuenta de la gestión de su zona.

Rodeado de una corte muy dinámica, el propio Rey se ocupa de la cartera del Interior y de Defensa, mientras que su esposa la Reina Djehami, nacida Kwin-Epo, es la Ministra de la Cooperación. Su corte cuenta con altos dignatarios, incluido un cuerpo diplomático destacado en Alemania, Bélgica, Gabón, Suiza y U.S.A.
Junto a Su Majestad Kpodegbe Toyi Djgla, podemos destacar otro rey de Benín, Su Majestad Toffa IX Bbeze, que aboga por integrar las autoridades tradicionales en los asuntos públicos. Sostiene que las «legitimidades no elegidas deben ser institucionalizadas al lado de los diputados, sin convertirse por ello en hombres públicos, lo que tendría la ventaja de constituir un contrapoder cara a la hegemonía de una clase política que no persigue siempre el interés superior del pueblo».
Como podemos apreciar, los reyes tradicionales, lejos de aparecer como meras añoranzas del pasado, tienen una proyección muy actual e incardinada en el nudo de los intereses que preocupan a sus conciudadanos.

Camerún.
En Camerún el Rey Dika Akwa III sorprende por la amplitud de sus conocimientos. Es antropólogo, egiptólogo, historiador, jurista y hombre político. Estamos en presencia de un auténtico líder panafricano.
Nacido el 27 de enero de 1933, es el 109 descendiente de una vieja dinastía africana, nieto del Rey Dika XI, signatario con el Rey Douala Manga Bell del Tratado de Protectorado del 12 de julio de 1884 con la Alemania Imperial.

El 21 de octubre de 2001 tuvo lugar en Douala la consagración al trono como XI soberano de la dinastía de los Akwa de su Majestad Din Dika Akwa III, en un acto solemne que la prensa local calificó como «un acontecimiento mayor que la historia conservará en su recuerdo». La ceremonia, en efecto, fue muy lucida con asistencia de una inmensa multitud ataviada con vestimentas multicolores, que aguardaba desde el alba apostada en las inmediaciones del río Wouri. Nadie quería dejar de contemplar esta bella y solemnísima ceremonia, que no se celebraba desde 1935.
Para darnos una idea de la importancia y veneración que los cameruneses sienten por este tipo de actos, baste reseñar que se encontraban presentes, y en primera fila, la élite del país, que respondió como una piña a la cita monárquica. Allí se encontraban el Presidente del Tribunal Supremo, el Ministro de Defensa, Generales de la Armada, Gobernadores, Prefectos, Alcaldes, Directores Generales de Sociedades, Su Eminencia el Cardenal de la Iglesia Católica, el Gran Imán de Douala, Cuerpo Diplomático…en definitiva «todo el Ghota camerunés».
Los pares del Rey Akwa, soberanos tradicionales de Camerún, también, como es lógico, se encontraban presentes, junto a una nutrida representación de monarcas tradicionales extranjeros, entre los que destacaba Su Majestad Kpodegbe Toyi Djgla, XVI Rey de Allada, Presidente del Consejo Superior de Reyes de África.
Su primer Decreto, momentos posteriores a su proclamación, fue declarar el día 16 de diciembre de cada año como Jornada del Recuerdo a la Memoria del Rey Dika Mpondo, heroico resistente al poder colonial alemán, que falleció en un campo de deportados en el año 1916.
Honores y distinciones son distribuidos por el Rey entre sus más fieles seguidores, continuando una tradición de los Akwa.

Dr.D. Francisco M. de las Heras y Borrero, Presidente de la Diputación de esta Ilustre Casa Troncal.
En una próxima y última entrega concluiremos esta serie de estudios dedicados al ejercicio del fons honorum por parte de las monarquías tradicionales africanas en el contexto de sus diferentes países, exponiendo los casos de BURKINA-FASO, BURUNDI, RUANDA Y GHANA.