Por el Dr. Francisco M. de las Heras y Borrero, Presidente de la Diputación de la Casa Troncal de los Doce Linajes de Soria.

La Orden de Malta, un ente soberano sin territorio, caso único en el mundo, ha retenido en varias ocasiones nuestra atención, dedicándole diversas entradas relacionadas sobre todo con la noción de soberanía. Hoy mostramos un aspecto soberano más de la Orden, esta vez anclado en la organización de su Correos Magistral.

Como una muestra más de su soberanía, la Orden de Malta ha organizado un servicio de correos, el Correos Magistral, que desde el 15 de Noviembre de 1966 emite sellos postales, que pueden ser considerados normales, amparados por los acuerdos postales que les aseguran una circulación usual.
Es este un tema no exento de polémica, por cuanto que la Orden de Malta organiza, de manera unilateral, un servicio de correos entre sus sedes magistrales de Roma y sus diversas embajadas a través del mundo, sin obtener, previamente, el acuerdo del Estado italiano que le acoge, y que le otorga la extraterritorialidad a sus sedes, pero no la consideración de un territorio.
Un servicio de correos implica un territorio en el cual se asegura el reparto de la correspondencia, y, sin embargo, la Orden de Malta carece de este requisito, no tiene territorio. En la integridad del territorio italiano es el gobierno italiano el responsable exclusivo del servicio postal. Para Bernardini «el ejercicio de una actividad postal en territorio italiano por parte de la Orden de Malta constituiría un ilícito internacional» ().
El gobierno italiano se opuso formalmente a la implantación de éste servicio, cuyo tema fue debatido en el Consejo de Ministros del 30 de Septiembre de 1966, adoptándose un acuerdo, comunicado a la Orden por el Ministerio de Asuntos Exteriores el 7 de Octubre del mismo año, en el cual se declara que los sellos de la Orden de Malta no tienen validez postal para la correspondencia enviada desde Italia o en tránsito por Italia ( ).

Pese a esta toma de posición del gobierno italiano, la Orden de Malta procedió el 15 de Noviembre de 1966 a la primera emisión y venta de sellos, que, a partir de entonces, viene efectuándose cada año de forma periódica y regular, lo que supone una evidente demostración de soberanía.

Paralelamente a la emisión de sus sellos, y a fin de dotarlos de validez internacional, la Orden viene firmando, a partir de 1977, acuerdos postales con diversos países, garantizándose de ésta forma la validez de sus emisiones, al menos con los países signatarios.
Desde el 27 de Junio de 1977, en que se firmó el acuerdo con Nicaragua, se han firmado las siguientes convenciones por orden cronológico:
Liberia, El Salvador, Argentina, Filipinas, Uruguay, Chile, Togo, Somalia, Benin, Cuba, Guatemala, Costa de Marfil, Ecuador, Portugal, Venezuela, Honduras, Burkina Fasso, Macao, Sierra Leona, Senegal, Panamá, Cabo Verde, Costa Rica, Nigeria, Gabón, Camerún, Líbano, Zaire, Congo, Comores, Guinea Bissau, Guinea Conakry, Santo Tomé y Príncipe, Austria, Paraguay, Hungría, Centro África, Polonia, San Marino, Tchad, Canadá, Madagascar, Eslovenia, Croacia, República Checa, Eslovaquia, Filipinas, Georgia, Lituania, Mali, República Democrática del Congo, República Dominicana y Seychelles, Bulgaria y Ciudad del Vaticano.
Aunque muy apreciadas por los filatélicos, las emisiones de sellos de la Orden no son algo estrictamente anecdótico y reducido al interés y curiosidad de los coleccionistas (lo cual, no obstante, le produce importantes ingresos a la Orden), sino que forman parte activa de un auténtico servicio postal. Cerca de dos mil envíos son efectuados anualmente desde el Palacio Magistral de Roma, situado en la vía Condotti, con destino a las diferentes embajadas, representaciones y delegaciones de la Orden.

Cada año se dedica una emisión a San Juan Bautista, Patrón de la Orden, y a la celebración de la Navidad. Los filatélicos aprecian sobre todo los dos o tres pliegos de sellos que, también con carácter anual, ilustran las obras de arte y subrayan el mensaje ético y cultural sanjuanista. A partir del 1 de enero de 2005 los valores de los sellos se expresan en euros.
Hasta la fecha la Orden no es miembro de la Unión Postal Universal, creada en Berna por el Tratado de 9 de Octubre de 1874, para lo que precisa firmar acuerdos postales con 108 países, casi el doble de las 56 convenciones hasta ahora firmadas.
Los servicios postales de diferentes países dedican, por su parte, ediciones especiales de sellos a la Orden de Malta, que son, igualmente, debido a su rareza, muy buscados por los filatélicos.