Cumpliendo con nuestro objetivo de ir publicando la temática relativa a las condecoraciones, vamos a iniciar hoy la presentación del Derecho Premial de aquellos países en los que la Casa Troncal tiene establecido un Capítulo, comenzando por la República Dominicana.
Orden al Mérito de Duarte, Sánchez y Mella
El precedente de esta condecoración lo constituye la Orden del Mérito de Juan Pablo Duarte, instituida en tiempos del Dictador Rafael Leónidas Trujillo por Ley 91 del 24 de febrero de 1931. A partir del 15 de septiembre de 1954 pasó a denominarse Orden del Mérito de Duarte, Sánchez y Mella, entendiéndose que cada vez que la legislación diga Juan Pablo Duarte, “se entenderá que dice Duarte, Sánchez y Mella”, siendo el más elevado honor y el más distinguido premio al mérito que ofrece la República Dominicana.

Las condecoraciones otorgadas son exclusivamente personales y no hereditarias y premian “los servicios distinguidos a la Patria, al mérito sobresaliente, los beneficios a la humanidad, los grandes descubrimientos científicos, las obras de arte sobresalientes y todos los hechos meritorios”.
Comprende los siguientes grados: Collar, Gran Cruz Placa de Oro, Gran Cruz Placa de Plata, Gran Oficial, Comendador, Oficial y Caballero. El Presidente de la República es el Jefe de la Orden, que puede conferirla a propuesta de su Consejo, presidido por el Secretario de Estado de Relaciones Exteriores, o de “motu propio”, tanto a nacionales como a extranjeros, de uno u otro sexo.

Queda terminantemente prohibido el uso de las joyas y distintivos de la Orden a toda persona que no la posea, y quien la use en un grado más elevado del que indique su diploma, podrá ser borrado del cuadro de sus miembros.
Esta condecoración es la utilizada para los intercambios de visitas con Jefes de Estado y representantes extranjeros.

Entre las personalidades internacionales que ostentan esta alta distinción figura el Comisario Europeo para la Cooperación al Desarrollo, Louis Michel, quien visitó durante su mandato reiteradas veces la República Dominicana.

Orden Heráldica de Cristóbal Colón.
El antecedente legislativo de esta Orden se encuentra en la Resolución del Presidente de la República Ulises Heraux, de 24 de noviembre de 1898, mediante la que resuelve crear una “Orden Heráldica”, que se llamará Orden Colombina, para premiar los servicios prestados a la República “con motivo del hallazgo de los supuestos restos de Don Cristóbal Colón, Descubridor de la América (…//…) el 10 d
septiembrede 1877″. Aunque recientemente, y gracias a la ciencia, se demostrase que los restos del insigne marino descansan en la Catedral de Sevilla.

A partir de la Ley de 22 de julio de 1937, adoptada bajo el mandato del General Trujillo, la Orden Colombina se transforma en Orden Heráldica de Cristóbal Colón. Además de los trabajos meritorios, que se relacionen con “el Descubridor de América, sus pretendidos restos, o con el Faro monumental que se erigirá en su memoria”, premia, igualmente, “los servicios distinguidos a la Patria o a la humanidad y el mérito sobresaliente en las artes o en las ciencias”.
Comprende, a similitud de la Orden de Duarte, Sánchez y Mella, los grados de Collar, Gran Cruz Placa de Oro, Gran Cruz Placa de Plata, Gran Oficial, Comendador, Oficial y Caballero, siendo, asimismo, el Presidente de la República su Jefe Supremo.
Sorprendente y curiosamente, pese a su denominación, esta orden no tuvo, ni tiene, ninguna connotación con la heráldica, ni a sus beneficiarios se les otorgó, ni se les otorga, el uso de ningún blasón. No obstante, pensamos que nunca es tarde para corregir esta laguna.